¿Cuánto falta para ver a Dillom en vivo?

"Por cesárea" suena en loop en nuestros auriculares pero no es suficiente. Queremos estar en la presentación oficial.

Dice que siempre le gustaron las películas de terror. Y que de chico era fan de los Ramones. Vivió tiempos difíciles y surfeó olas de oscuridad. La vida de Dylan en realidad no es muy diferente a la de otras personas de su edad pero lo que sí es única es la forma en la que exorcizó todo: se abrazó a esos personajes de películas para construir a Dillom, su alterego; y se abrazó, también, al nene ramonero para componer canciones que nos cacheteen un poco. 

¿Qué hubiese pasado si ante cualquier situación de nuestras vidas hubiésemos tomado la peor de todas las decisiones disponibles? Ese fue el disparador que utilizó Dylan para este nuevo disco de Dillom. 

En cada uno de los temas que componen "Por cesárea" se encuentra mugre, miseria, dolor. El sonido parece estar siempre atravesado por un espíritu intoxicado, un espíritu de Pity Álvarez. Las palabras que utiliza para narrar, las temáticas, también, y hasta una particularidad muy marcada en la forma de cantar nos remiten a ese rock barrial más proletario que supo destacarse de toda esa escena. Pero, claro, acá es necesario hacer una salvedad: Dillom no viene a salvar el rock, por más que le nazca de manera natural hacer canciones que tengan mucha de la esencia rockera. 

"Estoy un poco hinchado las pelotas de hacer música con la computadora y todo eso... igual no es que grabemos con una papa. Grabamos con una computadora... Tenía ganas de algo que suene más orgánico, más con vida", contó Dillom en diálogo con Datta, para luego bromear un poco con las consecuencias que puede traer eso: "Creo que hay un público más huérfano del rock que cualquier boludo que se cuelgue una guitarra todos dicen 'es el próximo salvador del rock'. Se gana público por eso pero no quiero ganar público por tocar instrumentos sino porque la música esté buena". 

¿Y está buena la música? Sí, claro. Por Cesárea es uno de los mejores discos que salió en esta primera parte del año y por eso las expectativas por la presentación en vivo son altas. La cita -posiblemente la primera de muchas otras- es el 19 de junio en el mítico Luna Park, lugar donde ya llenó años atrás. Las entradas posiblemente ya debieran estar agotadas porque iban a salir este miércoles a las 7PM pero por un error de sistema se pospuso para 24 horas después y ahora sólo queda esperar para hacer la fila virtual para conseguir un lugar en lo que será una de las noches más esperadas. 

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