¿Es la mejor paritaria? Quizás. La Cámara alta tendrá una actualización de salarios, los cuales ya ascienden a ocho millones de pesos bruto.
En un contexto de motosierra y licuadora, de fuerte ajuste económico, pareciera ser que los únicos sueldos que suben y pueden ganarle a la inflación son los de nuestros representantes en el Senado. Vuelven a ser noticia hoy porque, a un mes del último aumento, volvieron a incrementar sus dietas, lo que las lleva a ocho millones de pesos bruto.
En abril quedaron expuestas las diferencias entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel respecto a los sueldos de los representantes del Poder Legislativo. La discusión no afectó lo que ocurrió después en el recinto cuando se aprobó el aumento, a contramarcha de lo ocurrido en Diputados y en el propio Poder Ejecutivo cuando el libertario suspendió el propio aumento que se había otorgado. Ahora, tendrán otro incremento en mayo del 9% (2% retroactivo a abril y 7% a mayo) como consecuencia de la paritaria de los trabajadores del Congreso Nacional a la que están atadas sus dietas.
De este modo, los 72 senadores y senadoras pasarán de cobrar siete millones de pesos bruto a ocho millones, a partir del mes que viene. Hasta el último mes, cobraban en mano cuatro millones y medio, mientras que ahora superarán los cinco. El texto que se refiere a las dietas que acordaron los bloques con Villarruel señala que pasarán a estar conformadas por 2.500 módulos -de $1.800-, más un adicional de 1.000 módulos por gastos de representación y 500 módulos de adicional por desarraigo. Sobre este último punto, sólo cuatro no lo cobran en la actualidad. Además, se agregará una dieta a las 12 actuales para compensar el aguinaldo.
Aunque los 7 senadores libertarios sostuvieron que no acompañaron la votación en el recinto porque la política debe sacrificarse tanto como los ciudadanos, ninguno lo donó ni hizo nada al respecto. Esta situación despertó resquemores en la Cámara de Diputados, donde el presidente Martín Menem frenó el aumento pasado y prometió que lo abordarían una vez concluido el debate por la Ley Bases, lo que ocurrió semanas atrás sin que haya ninguna modificación.
Hasta antes de este nuevo aumento de las dietas, los diputados cobraban un promedio de entre dos millones y medio y tres millones de pesos menos que los senadores. Mientras un senador recibirá, por ejemplo, cinco millones de pesos en mano, un diputado recibirá alrededor de un millón y medio. Un diputado dialoguista llegó a admitir a Infobae que “del otro lado cobran cuatro veces más que nosotros, la diferencia ya es muy grande, si Menem no hace algo vamos a tener que apurarlo nosotros”.
