La idea es clara: frenar el descontento social en este inicio de gobierno y tratar de que se vea como una movilización más. Ya anunciaron que descontarán el día a estatales que se adhieran.
El Gobierno nacional se enfrenta a su primera gran prueba de fuego desde que asumió en diciembre pasado. Si bien desde que presentó el mega decreto de desregulación de la economía, y aún más cuando dio a conocer la Ley Ómnibus, se han hecho cacerolazos y han habido varias marchas y movilizaciones en su contra, lo cierto es que el próximo 24 de enero se espera que todo eso se multiplique y potencie en el primer paro general. En medio de la discusión legislativa, el oficialismo intenta desarticular cómo puede la medida de fuerza y contener el descontento social para conservar la legitimidad política necesaria para continuar peleando en el recinto.
¿Cómo? Con anuncios como el de ayer, en el que el vocero oficial, Manuel Adorni, comunicó que se le descontará el día de trabajo a todo aquel empleado estatal que se sume al paro y con el nuevo impulso de la línea telefónica abierta para denunciar si alguien “obliga” a pagar.
“Se ha tomado la decisión de descontar el día a los empleados estatales nacionales que se adhieran al paro. El salario es una contraprestación y quien no trabaja es razonable que no cobre”, aseguró Adorni, pese a que la medida roza lo inconstitucional ya que el derecho a huelga está amparado por la Constitución Nacional.
“Seguimos esperando los argumentos del por qué del paro, que no nos terminan de quedar claro”, llegó a ironizar el Vocero. Luego insistió con la línea para denunciar presuntas presiones, tal y como lo hizo contra los movimientos sociales que pararon el 20 de diciembre pasado. El problema que se objeta contra esa línea es que, si bien el Gobierno aseguró en aquella oportunidad que había miles de denuncias, a la hora de presentarlas a la Justicia ni siquiera llegaban a decenas, y del caso nunca se supo más nada.
Con la premisa del orden y bajo el lema de “una Argentina distinta en la que el que las hace las paga”, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, intentará hacer gala nuevamente de su protocolo antipiquetes. "Las oligarquías defienden sus intereses. Hay que dar una pelea de vida o muerte”, aseguró para intentar deslegitimar el descontento social que exprese la masa trabajadora que concurrirá el próximo miércoles a marchar y recurriendo a trasladar el término de “oligarquía”, que le es propio incluso a ella misma, para dirigir el odio hacia otro lugar.
Siguiendo el mismo modus operandi, Bullrich aseguró que la línea se encuentra colapsada por denuncias contra los sindicatos, denuncias que luego se verá (o no) en qué consisten. Es cierto que el protocolo antipiquetes se activa, pero también lo es que en verdad no contabiliza tantos logros en su haber. Son más las marchas que lo sobrepasaron que aquellas que ha impedido.
Por eso los gremios y distintas organizaciones que convocan a marchar el próximo 24, lejos de retroceder, continúan avanzando. Pese a la advertencia de descuento del día, el secretario general de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, retrucó: “el 24 los estatales paramos en todo el país. Vos también podrías parar, Adorni, pero de decir burradas". "¿Qué van a hacer con la que van a descontar? Porque va a ser mucha, la adhesión va a ser total. ¿Se la van a entregar al FMI, a depositar en la cuenta de Techint o le van a pagar al Hotel Libertador?", ironizó Aguiar sobre los descuentos.
"Este paro, Manuel Adorni, es responsabilidad del Gobierno. Son ustedes los que nos empujan a la huelga con salarios congelados y sin paritarias, quita de horas extras y despidos, un DNU inconstitucional y la Ley Ómnibus con reforma laboral que deja en disponibilidad hasta a los trabajadores de la planta permanente", remarcó el sindicalista de ATE. "Cuesta recordar que una medida de fuerza haya estado tan fundada como esta. No hay otro motivo que el incumplimiento de sus obligaciones como patronal. Nadie para porque quiere", le recordó.
"Lo único que va a lograr es que el paro sea más contundente, más fuerte y la movilización tenga mucho más cuerpo", sostuvo el dirigente de ATE Capital, Daniel "Tano" Catalano. El dirigente de SMATA Mario Manrique le respondió a Bullrich que la movilización será tan masiva que “no van a alcanzar las veredas”. "Y naturalmente la marcha será por la calle", indicó.
Mientras tanto, también parte de la maniobra para evitar el paro de estatales, el Gobierno nacional convocó a tratar paritarias hoy desde las 12.30. "Desde ATE esperamos que esta vez hagan un ofrecimiento concreto. Necesitamos empezar a recuperar el poder adquisitivo perdido. El cierre de las liquidaciones es inminente y los haberes de enero no pueden quedar sin aumento", agregó Aguiar. Asimismo, advirtió que "si el llamado a esta reunión es una estrategia para que levantemos el paro del 24/01, eso no sucederá. Son muchos los reclamos que tenemos los estatales, además del salarial".
En el día de ayer también se dio una reunión de coordinación de la medida de fuerza entre distintos representantes de Unión por la Patria, dirigentes sindicales y de movimientos sociales. Héctor Daer, parte del triunviro de la CGT, afirmó que el paro y la marcha generarán "la visibilización de las organizaciones sindicales y de los científicos, las personalidades de la cultura, del deporte y los inquilinos" afectados por medidas del Gobierno.
El gobernador bonaerense Axel Kicillof encabezó la reunión en la sede porteña de la Casa de la Provincia de Buenos Aires. Evaluaron la crítica situación que provocan las medidas económicas del Gobierno en provincias y municipios, dieron un fuerte respaldo al paro de las centrales sindicales del 24E y buscaron coordinar la movilización frente al Congreso.
Participaron los gobernadores Ricardo Quintela (La Rioja) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego) de manera presencial; además de Sergio Ziliotto (La Pampa), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Raúl Jalil (Catamarca) vía Webex. También los intendentes del conurbano Jorge Ferraresi (Avellaneda), Lucas Ghi (Morón), Mariel Fernández (Moreno),Gustavo Menéndez (Merlo) y Andrés Watson (Florencio Varela).
Para la coordinación de la movilización estuvieron presentes en el encuentro el triunviro cegetista, Abel Furlán (UOM), Hugo Yasky (diputado y secretario general de la CTA-T); Hugo Godoy (secretario general CTA-A), Oscar de Isasi (ATE PBA); Roberto Baradel (SUTEBA); Andrés Rodríguez (UPCN), José Luis Lingeri (OS); y también representantes de los movimientos sociales como Emilio Pérsico (Movimiento Evita) y Juan Grabois (Frente Patria Grande).
Por último, fueron parte del encuentro los jefes de los bloques de diputados y senadores de UxP, Germán Martínez y Jorge Mayans respectivamente, que brindaron un informe de la discusión parlamentaria sobre el DNU y la Ley Ómnibus.
Cabe recordar con respecto a ello que la Justicia se ha volcado hasta el momento a favor del pedido de cautelar presentado por la CGT para que el capítulo laboral del decreto quede sin efecto. Ahora la Justicia ha aceptado la apelación del Gobierno y por ello la causa se elevó a la Corte Suprema de Justicia.
