El Congreso estadounidense presentó dos proyectos de ley que buscan restringir el uso de la aplicación para funcionarios del gobierno e incluso prohibir TikTok para todo el país.
Una investigación interna en ByteDance, la compañía dueña de TikTok, encontró que varios empleados accedieron a datos privados de los perfiles de la red social de periodistas de Estados Unidos. La empresa debió admitir la falla de seguridad y despedir empleados, lo cual complicó la relación de la red social con Estados Unidos, cuyo Congreso trataría una ley para restringir el uso de la aplicación en el país.
El conflicto tiene que ver con el acceso a la ubicación y seguimiento que hacía TikTok de distintos periodistas norteamericanos a través de sus direcciones IP, violando normas de seguridad y privacidad. Incluso, algunos empleados de la app se contactaron con estos periodistas aunque, según ByteDance, el objetivo de esto era descubrir si habían estado cerca de otros empleados que podrían haber filtrado información a la prensa.
En las últimas semanas, al menos 14 estados han bloqueado TikTok en los dispositivos administrados por el gobierno. El Congreso de Estados Unidos tiene previsto aprobar esta semana una ley que prohíbe a los empleados del gobierno federal descargar o utilizar TikTok en sus dispositivos de propiedad estatal. Además, existe un segundo proyecto de ley, que se presentó ante el Congreso la semana pasada, que prohibiría la aplicación para todas las personas en Estados Unidos.
Los medios estadounidenses también se pronunciaron ante el peligro de que sus trabajadores sean rastreados. El Financial Times afirmó en un comunicado que “espiar a los reporteros, interferir en su trabajo o intimidar a sus fuentes es completamente inaceptable. Investigaremos esta historia más a fondo antes de decidir nuestra respuesta formal”.
La portavoz de BuzzFeed News, Lizzie Grams, indicó que la compañía estaba profundamente perturbada por el informe, diciendo que muestra “un flagrante desprecio por la privacidad y los derechos de los periodistas, así como de los usuarios de TikTok”.
Entretanto, la popular aplicación continúa sus esfuerzos para continuar bajo propiedad de la firma china ByteDance y hace tres años intenta demostrar a los departamentos y agencias gubernamentales de Estados Unidos que no se puede acceder a los datos personales de los ciudadanos. La principal preocupación del gobierno estadounidense es que la empresa garantice que su contenido no puede ser manipulado por el Partido Comunista de China o cualquier otra entidad bajo la influencia del gobierno de ese país.
El conflicto entre ByteDance y Estados Unidos había mejorado el año pasado cuando el presidente Joe Biden revocó una orden ejecutiva de su predecesor Donald Trump para prohibir TikTok en Estados Unidos. Sin embargo, las negociaciones entre su administración y la compañía de redes sociales continuaron sobre un posible acuerdo que abordaría las preocupaciones de seguridad.