Junio llega con aumentos récord en alquileres

Ya sea que hayan firmado sus contratos bajo la Ley de Alquileres original o con modificaciones, en ambos casos los índices rompieron el techo de los aumentos. 

Alquilar se pone cada vez más complejo en un contexto de ajuste y crisis económica. La canasta básica total -que mide alimentos, vestimenta, transporte, educación, salud, etc.- lleva acumulado en lo que va del año un 67% de incremento. Su valor hoy es de $828.158,19, según el Indec. Pagar sólo tarifas de servicios mínimos implica gastar más de 100 mil pesos. Y si encima te toca la actualización del alquiler en junio, lo cierto es que las noticias no son buenas porque los aumentos serán récord. 

‌Para quienes quedaron bajo el paraguas de la vieja Ley de Alquileres con actualizaciones anuales y contratos de tres años, el valor base a partir del cual se fijan los aumentos es el Índice de Contratos de Locación elaborado por el Banco Central, que contempla en partes iguales la variación de la inflación (de acuerdo al IPC que mide el INDEC) y los salarios, según la remuneración promedio de los trabajadores estables (Ripte). La mala noticia es que alcanzará su récord en junio: se viene un aumento del 233,7%. O sea, si pagabas $200.000, ahora vas a pagar $667.400 a partir del mes que viene.

Otro caso similar es el de quienes firmaron bajo la Ley de Alquileres modificada el año pasado, es decir, aquellos que lo hicieron entre el 19 de octubre y el 31 de diciembre. Para este tipo de contratos se establecían ajustes semestrales según el coeficiente Casa Propia. El cálculo de este índice se basa en la consideración del indicador más bajo entre el promedio de la variación salarial del último año y el promedio de la inflación durante el mismo período. Es decir, si firmaste en diciembre, en junio vas a tener que pagar una actualización del 56,5%, también récord.

‌Por último, un capítulo aparte merece quienes firmaron dentro de la gestión libertaria. La Ley de Alquileres pasó a la historia con el megadecreto de diciembre, por eso, desde entonces los contratos son libres sin ningún tipo de regulación, aunque en la mayor parte de los casos se pactaron con actualizaciones trimestrales según inflación (IPC). Por ejemplo, a quienes les toque actualizar en junio, el incremento respecto a marzo fue del 30,21%.

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