«Sigo esperando que nuestro hijo regrese», dijo su madre en el tercer aniversario del asesinato, luego de la última jornada del juicio.
Graciela y Silvino, los padres de Fernando Báez Sosa, invitaron a un homenaje a tres años del asesinato de su hijo en el Anfiteatro Lago Parque Libres del Sur de Dolores. Este miércoles además finalizó el juicio oral del caso donde declararon más de 100 testimonios, incluidos cinco de los imputados por el ataque al joven de 18 años que murió a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell. El juicio entró en cuarto intermedio hasta el 25 y 26 de enero cuando se presentarán los alegatos.
Los padres de Fernando llegaron por la tarde al anfiteatro donde una multitud esperaba para comenzar el acto levantando pancartas con el rostro que exigían «Justicia por Fernando». El cuerpo de abogados que defendieron a la familia Báez Sosa también estuvo presente en el homenaje. Entre los cantos de pedidos de perpetua para los imputados y «Fernando presente», Graciela y Silvino encendieron velas por su hijo y pidieron un minuto de silencio en su memoria.
A continuación los familiares del joven, acompañados de Oscar Rossi, padre de la novia de Fernando, plantaron un árbol de jacarandá que era el favorito del homenajeado. Tras una serie de canciones comenzó la misa interreligiosa que habían convocado para la fecha, donde representantes de distintas religiones ofrecieron palabras en memoria de Fernando y reflexiones sobre la justicia, la perseverancia y la unión entre los familiares y todos aquellos que se movilizaron por el caso.
Además, durante el acto se llegó a un récord en la colecta de alimentos no perecederos que convocaron los Báez Sosa con distintas ONGs de Dolores. Una vez entrada la noche, el acto finalizó con las palaras de Silvino y Graciela entre las linternas de celulares y velas en alto para homenajear a Fernando a tres años de su brutal asesinato en Villa Gesell.
Graciela Sosa: «Era nuestro sol, hoy quedamos vacíos»
Silvino Báez comenzó agradeciendo a la multitud que los acompaño: «Con mi compañera Graciela tratamos de ayudarnos uno al otro para seguir adelante, con la ayuda de la gente que siempre nos demuestra su cariño (…) nos da la fuerza suficiente para estar acá y pedir justicia por Fernando».
Luego Graciela tomó la palabra y dedicó un triste mensaje a su hijo entre los aplausos de cientos de personas que se encontraban en el anfiteatro y sostenida por el abrazo de su compañero Silvino. «Un día Fernando quiso ir de vacaciones, empezamos a juntar para que él pueda viajar y ser feliz con sus amigos. Había terminado la secundaria y pudo ingresar con mucho sacrificio a la facultad de derecho», comenzó la madre.
«Me dijo ‘mami esta es la última vez que me voy porque mis compañeros tambén tomarán nuevos rumbos al igual que yo y tal vez ya empiece a trabajar’. Quisimos darle con Silvino darle la oportunidad. Nunca pensamos que Fernando no regresaría a nuestro lado«, recordó sobre el viaje de vacaciones que hizo el joven en 2020.
«Era nuestro sol. Hoy quedamos vacíos nada quedó en nuestra casa, estamos solitos. En mi casa nunca más hubo fiesta, sin él la vida se terminó para nosotros», continuó Graciela, «Vinimos acá a Dolores, preparamos nuestras valijas con Silvino en busca de justicia. Nosotros no queremos veganza, solo queremos que paguen lo que le hicieron a nuestro hijo».
«Mi hijo es un chico humilde, decente, con ganas de progresar, con ganas de ser alguien. Amaba a sus amigos, amaba a su novia y también a nosotros. Él era nuestra mayor alegría, nuestro sostén. Por él yo daba la vida», dijo emocionada la madre de Fernando.
«Cuando estaba en el juicio vi reiteradamente cómo golpeaban a mi hijo. Vi cómo levantaba sus manos. Como madre sentía ese deseo de lanzarme sore el cuerpo de mi hijo para cubrirlo, para que dejaran de golpearlo. Vi cómo lo discriminaban por su color de piel», contó Graciela sobre su experiencia en el juicio oral que tuvo un total de 13 audiencias.
«Sigo esperando que mi hijo regrese, a pesar de que sé que el nunca regresará en esta vida. (…) Gracias mi amor por habernos dado tantas felicidades durante 18 años», cerró la madre de Fernando entre los aplausos de la multitud.