Gran Hermano: Alfa quedó eliminado en medio de un ataque de furia

Perdió en el mano a mano final con quien supo ser su gran compañera, Romina, por un 52,83% versus un 47,17% de la exdiputada.

Podría haberse ido de una manera más pacífica, limar asperezas y hacer las pases con quien supo ser su gran compañera, Romina. Pero ese no hubiese sido el estilo de Alfa: el hombre de 60 años quedó eliminado del reality por el 52,83% de los votos en un mano a mano final con la exdiputada. Abandonó la casa en medio de un ataque de furia, mientras en el cielo explotaban fuegos artificiales que venían desde la calle. “Son los perucas, los peronistas”, salió vociferando Walter de manera repetitiva.

Además de disparar en contra de la supuesta multitud peronista que le habría hecho el aguante a Romina, el participante se fue de la casa dejando un mensaje al menos controversial para sus compañeros: «acuérdense que son 1 contra 6», le dijo primero a Camila, y luego a los demás.

La Tora fue la primera salvada de la noche. Como si ocupara un lugar extra en un duelo que se veía venir como titánico entre «la mamá y el papá» de la casa, como los definió el conductor del programa, Santiago del Moro, Lucila se ganó una semana más dentro de la casa por haber recibido tan solo el 5,61 % de los votos.

La jugada de Julieta, la líder de la semana, salió redonda y compite por ser una de las mejores de esta edición según señalaron los analistas del programa. Si bien tenía la oportunidad de sacar de la placa a su amiga, Romina, ella le había pedido que en caso de quedar nominada no lo hiciera. El foco se había trasladado a la Tora, a quien es más allegada, pero a quien también había nominado la última vez. Quedaban solo Alfa y Camila como opciones.

Como dijo la participante, su principal estrategia era «cuidar a Romi», entonces salvó a la menos pensada, Camila, para que los votos de las otras dos mujeres se unieran en contra de Alfa y se quedaran ambas. El pensamiento de Poggio fue que, si dejaba a Camila en placa, los votos se iban a dividir entre Alfa y ella, lo que hacía peligrar la situación de las chicas. De esta manera, la joven tuvo un rol fundamental para conseguir lo que muchos desearon desde que comenzó esta edición, pero que nadie había podido hasta el momento.

Resultó ser que Alfa estuvo equivocado: los fuegos artificiales no eran de los «perucas» que apoyaron a Romina y lo dejaron fuera de juego, sino que provenían de una manifestación realizada por Sindicato Argentino de Televisión, Servicios Audiovisuales, Interactivos y de Datos (SATSAID).

El reclamo salarial ya había sido manifestado semanas atrás cuando obligó al programa a cambiar su día de emisión y pasar la gala de eliminación al lunes. Pero esta vez organizaron una pequeña movilización en el frente de la casa que incluso impidió al participante poder llegar al estudio donde lo esperaba Del Moro para hacer la clásica recibida. Así lo anunció el conductor en vivo, afirmando que se trataba de «problemas de fuerza mayor».

El participante recibió el 52,83 % de los votos frente al 47,17 % de la ex diputada. Pidió que no hicieran ningún cántico durante su salida. Su escena final representa su giro de 180° en la imagen que dejó a sus compañeros y al público en general que decidió sacarlo tras salvarlo primero en las múltiples ocasiones en que quedó nominado: a duras penas fue Camila la única que lo acompañó a buscar su valija, y su reacción ni siquiera fue instantánea, ya que todos los participantes se quedaron en el living a felicitar a Romina.

A Alfa lo condenaron sus malas formas, que el público llegó a calificar de violentas, sus mentiras, su soberbia y «narcicismo», según opinan algunos. También su actitud con Camila, que fue vista como un intento de acercamiento amoroso por parte de Walter y que cayó mal para el afuera dados los términos en que se entabló la relación entre ambos, que la participante definió muchas veces como «de padre e hija».

Son muchos los usuarios de las redes sociales que festejaron su salida. Entre ellos, la propia presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, quien lanzó un tuit en tono celebratorio a razón de la eliminación del participante.

Quedan solo 7 jugadores dentro de la casa, de los cuales solo Camila es un blanco asegurado para ir a la próxima placa por haber quedado ligada a la figura de Alfa. Esto significa que el grupo de amigos que quedó deberá empezar a romperse y comenzar a votarse puertas adentro para continuar en carrera.