El término surgió en 1944, pero no fue hasta 1994 que se instauró su conmemoración el 1 de noviembre. Algunas notas sobre el estilo de vida que cada vez gana más seguidores.
En noviembre de 1944 Donald Watson fundó en el Reino Unido la Vegan Society y utilizó por primera vez el término vegan para referirse a las personas que, a diferencia de los vegetarianos, no consumen ningún tipo de producto animal. Pero no fue hasta 1994, con la práctica más extendida a nivel global, que la Vegan Society decretó el 1 de noviembre como el Día Mundial del Veganismo.
Ahora, ¿qué es el veganismo y qué implica ser vegano? ¿Cuál es la diferencia con el vegetarianismo? Las personas veganas no consumen ningún tipo de producto animal. Es decir, no solo no comen carne sino que eliminan de su dieta lácteos y huevos, y deciden no utilizar productos que puedan contener derivados animales en su proceso de elaboración, tanto desde elementos de cuidado personal como el shampoo y el acondicionador a, por ejemplo, ropa de materiales como cuero o lana. En cambio, las personas vegetarianas eliminan de su dieta únicamente la carne, consumiendo todavía otros productos de origen animal.
Dentro del veganismo, como en todo movimiento, existen diferentes opiniones, pero hay algo que las personas que se identifican como veganas tienen en común: una postura ética. No se ve a los animales como mercancías a disposición del humano, sino que se los piensa como seres vivos que sienten y se rechaza su utilización para cualquier uso sea alimenticio, de transporte, textil, etc. Además, hay otra preocupación que tomó fuerza dentro del movimiento en los últimos años: el cambio climático. Diversos estudios sostienen que la producción ganadera (a la que el veganismo se opone) tiene un gran impacto ambiental, y necesitan para su rendimiento enormes cantidades de agua, además de ser fuente de los principales gases de efecto invernadero que contribuyen al calentamiento global.
La filosofía vegana está en expansión, y cada vez más personas deciden adoptar este estilo de vida. Según la UVA (Unión Vegana Argentina), en 2019 la población que se identificaba como vegana en el país era del 9%, y en 2020 ascendió al 12%. La UVA no pudo volver a hacer una medición en los dos últimos años, pero asegura que la tendencia “va en aumento”. Se espera, entonces, que el veganismo siga haciéndose espacio en las mesas argentinas.