Como un hito histórico, luego de tres décadas se logró firmar el acuerdo con la Unión Europea. En paralelo, Milei cuestionó en duros términos al bloque regional sudamericano.
La 65° Cumbre de Líderes del Mercosur que se desarrolló hoy en Montevideo tuvo dos hechos principales: el anuncio de un acuerdo sobre un tratado de libre comercio con la Unión Europea, y un muy duro discurso del presidente Javier Milei contra el bloque que la Argentina comparte con Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia. El Presidente usó palabras como “ahogo”, “prisión”, “cepo”, “ataduras” y “agotamiento” para describirlo, a la vez que sostuvo que el acuerdo con la UE aún dista de ser una realidad.
Milei cuestionó duramente a los aranceles externos y al rol del bloque regional sudamericano desde su surgimiento, llegando a mencionar que “sus restricciones han sido un escollo para el progreso de los argentinos”. “El Mercosur terminó convirtiéndose en una prisión. Aceptemos que este modelo está agotado y busquemos una nueva fórmula que nos beneficie a todos”, expresó el mandatario.
La posición del libertario se debe a que quiere lograr un acuerdo especial de comercio con el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump. Ocurre que cualquier tratado de los países miembros por fuera del bloque debe ser aprobado por la totalidad de los integrantes. El antecedente es la posición contraria del bloque al acuerdo de Uruguay con China, por ejemplo. Pero tal vez las cosas puedan cambiar su curso ya que Argentina recibió este viernes la presidencia pro témpore del bloque.
La noticia del acuerdo con la UE la dio a conocer la propia presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, quien participó de la cumbre junto a los presidentes Milei, Lula Da Silva (Brasil), Santiago Peña (Paraguay), Luis Arce (Bolivia), y los anfitriones uruguayos, el saliente Luis Lacalle Pou y el electo Yamandú Orsi. “Este acuerdo no es sólo una oportunidad económica, sino una necesidad política”, dijo la alemana.
El tratado birregional generará una de las zonas de libre comercio más amplias del mundo e involucra a más de 700 millones de personas. Supone la eliminación gradual de los aranceles al 91% de las exportaciones de la UE al Mercosur y viceversa al 92%. El Consejo de la UE tendrá que ratificarlo con mayoría cualificada, pero se sabe que Francia, Polonia y Países Bajos irán por el rechazo.