Francia: Pélicot reconoció ser un violador

Dominique Pélicot, el acusado en el caso que conmueve al mundo por haber drogado a su pareja durante casi diez años para que decenas de hombres la violaran, fue interrogado por primera vez.

“Soy un violador, como todos los que están en esta sala. Todos lo sabían, no pueden decir lo contrario”, fue la frase con la que Dominique Pélicot inauguró su declaración al ser interrogado por primera vez por estar acusado de drogar a su mujer durante casi diez años para que decenas de hombres la violaran en Francia. En su regreso al tribunal penal de Aviñón luego de la suspensión momentánea del juicio por sus problemas de salud, el hombre admitió este martes los hechos adjudicados, reconociendo los actos como violaciones. El acusado incluso “rogó” a su ex pareja, hijos y nietos “que lo disculpen”.

Dominique ya se había pronunciado en una anterior oportunidad durante la jornada inaugural del juicio el 2 de septiembre pasado cuando reconoció los hechos probados adjudicados. El testimonio del protagonista de este mega proceso (que incluye a 50 hombres de entre 26 y 74 años acusados de haber violado a su ex pareja) es crucial para sustentar la acusación.

Además de reconocer los hechos en tanto violaciones como tales, Pélicot trató de encuadrar su comportamiento en supuestos abusos que habría sufrido cuando tenía nueve años y una violación grupal de la que fue testigo cuando tenía 14. Cabe aclarar que el juicio se desarrolla con algunas particularidades, como la suspensión que medió esta semana, porque al hombre de 71 años le descubrieron un cálculo renal.

En los próximos días, el juicio continuaría con los interrogatorios de cuatro de los 50 acusados: Jean-Pierre M., de 63 años, Jacques C., de 72, Lionel R., de 44, y Cyrille D., de 54 años. Gisèle, la denunciante, agradeció este lunes a las personas que se manifestaron el sábado en su apoyo en toda Francia. “Gracias a todos ustedes, tengo fuerzas para librar esta batalla hasta el final”, destacó. 

Por último, nos gustaría resaltar un punto del tratamiento mediático del caso: al momento de hacer esta nota y al hacer una búsqueda de imágenes para la portada, había decenas de imágenes de la denunciante, pero no así del denunciado, cuya única imagen actual a la que pudimos acceder ni siquiera está en buena calidad.