EEUU: ¿y ahora quién competirá contra Trump?

Biden se bajó de su candidatura y ya no irá por la reelección, pero ¿cuál es el escenario político en los Estados Unidos tras esta movida del Partido Demócrata? 

La noticia estaba ya casi en puerta. Operado desde dentro y desde fuera, el presidente estadounidense Joe Biden fue durante las últimas semanas el centro de todas las impugnaciones por los cuestionamientos hacia su capacidad para estar al frente de un país. Es que se han hecho cada vez más frecuentes sus lapsus de olvidos o confusiones, incluso con funcionarios de su propio Gobierno, además de una performance altamente dubitativa en el debate presidencial contra el candidato republicano, Donald Trump. Finalmente el mandatario declinó su candidatura y anunció su respaldo a su vice, Kamala Harris, para que lo reemplace como aspirante a la presidencia en representación del Partido Demócrata, algo que deberá ser definido en menos de un mes. 

“Creo que lo mejor para mi partido y el país es que me retire y me concentre únicamente en cumplir con mis deberes como presidente durante el resto de mi mandato”, señaló Biden en un comunicado en el que resaltó lo realizado hasta el momento y en el que aclaró que dará un mensaje en vivo a todos los ciudadanos para explayarse sobre los motivos de su decisión.

“Ha sido el mayor honor de mi vida servir como su presidente. Y aunque ha sido mi intención buscar la reelección, creo que es en el mejor interés de mi partido y del país que me retire”, concluyó sobre sus fundamentos. Allí comunicó también su decisión de respaldar a su vicepresidenta, Kamala Harris, como candidata del Partido Demócrata, algo que ella agradeció bajo la esperanza de poder unir al Partido y que este la elija para enfrentar a Donald Trump el próximo 5 de noviembre. 

En las últimas tres semanas se habían acumulado numerosos pedidos de referentes demócratas para que Biden bajara su candidatura, entre ellos, el expresidente Barack Obama, con el argumento de su edad (tiene 81 años). Harris, de 59 años, se convirtió en el 2020 en la primera vicepresidenta de la historia estadounidense. Afroamericana y de ascendencia asiática, Harris se involucró desde sus tiempos como universitaria en cuestiones políticas como el apartheid en Sudáfrica y las relaciones raciales en Estados Unidos. En el 2016 desembarcó en la política cuando fue elegida senadora por California.

Si bien el respaldo de Biden convierte a Harris en la elección más probable para la nominación, eso debe resolverse en la Convención Nacional Demócrata que se realizará en Chicago entre el 19 y el 22 de agosto, la cual no está estrictamente obligada a volcarse por ella. Otras alternativas son la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer; el de California, Gavin Newsom; el de Illinois, JB Pritzker; el de Pensilvania, Josh Shapiro; y el actual secretario de Transporte, Pete Buttigieg.

Según las reglas del Comité Nacional Demócrata, un candidato debe recibir el apoyo de al menos 300 delegados para aparecer en la papeleta electoral de la convención y, una vez allí, lograr 1.986 votos para ser el candidato o candidata elegida para enfrentarse a Trump. Durante la jornada del domingo, los delegados de varios estados se reunieron de manera virtual. Tennessee fue el primer Estado en comprometer a todos sus delegados a Harris, y después hicieron lo propio Carolina del Sur, Carolina del Norte, New Hampshire y Florida.

Por su parte, Biden permanecerá como presidente hasta el 20 de enero, fecha final de su mandato, aunque los republicanos piden que dimita ya mismo.