En un acto frente a Tribunales, hablaron por primera vez en público los tres amigos que acompañaban al joven cuando fue asesinado por policías de la Ciudad.
Familiares y amigos de Lucas González, el joven de 17 años que fue asesinado hace un año de un balazo en la cabeza por efectivos de la Policía de la Ciudad en el barrio de Barracas, realizaron un acto frente a Tribunales en el que reclamaron justicia.
Con la asistencia de cientos de jóvenes que acompañaron el reclamo, por primera vez desde el asesinato, los sobrevivientes y sus familiares hablaron públicamente del hecho ocurrido el 17 de noviembre del 2021.
El primer orador del acto, que comenzó alrededor de las 19 horas, fue Ricardo Zuñiga, padre de uno de los jóvenes que salían de jugar al fútbol en el club Barracas Central cuando fueron atacados por efectivos de la Policía de la Ciudad. “Ni una bala más, ni un pibe menos”, fue la frase con la que concluyó su mensaje. Andrea, su esposa, contó cómo hace un año recibió un audio de su hijo avisándoles que le habían pegado un tiro a su compañero.
Joaquín Zuñiga (18 años) habló por primera vez en público y aseguró que “de perder a un amigo no se vuelve porque uno todo lo que hace no tiene sentido”. Sin embargo, destacó que de ese día elige “recordar los momentos felices” junto a Lucas.
“Me pegaron, me maltrataron, me dijeron que era un villero, que yo no podía ser jugador de fútbol, y hoy les respondo y les digo que el villero lo está logrando, de a poco lo está logrando”, expresó, describiendo en primera persona el ataque sufrido. “Quiero cerrar diciéndole a Lucas que lo extraño mucho y espero darle el abrazo que le quiero dar. ¡Lucas está presente, loco!” fue el cierre de su emotiva intervención.
Julián Salas, también de 18 años, aseguró que pasaron «el peor momento» de sus vidas. Contó que perdió a su “mejor compañero” en sus «rodillas» y relató el momento en que vieron dos policías a los que les pidieron ayuda “y lo único que hicieron fue cruzarnos contra las rejas, esposarnos y tirarnos al piso”.
Los padres de la víctima, Héctor “Peka” González y Cintia López recordaron a su hijo, contaron que “fue un año complicadísimo” y que Cintia “en dos oportunidades se quiso quitar la vida”.
“Yo sigo acá de pie, aca donde estoy, pidiendo justicia, solamente justicia, no quiero más nada” afirmó Héctor, y agregó: “Yo crié a un chico con valores, con mucho esfuerzo. Lo mandé a entrenar, yo no lo mandé a robar, yo crié un hijo de bien, me costó, y hoy estoy orgulloso de estar acá, de decir que es mi hijo, que Lucas no me abandona, que Lucas está al lado mío porque se lo pido todos los días».
«Hoy hace un año que mi vida se fue con mi hijo, ya no soy la de siempre, arruinaron a toda una familia, a todos sus amigos, en donde le sacaron los sueños a mi hijo, en donde ellos le cortaron las piernas a mi hijo. Yo hoy no quería estar acá, hace un año que vivo el calvario, la peor pesadilla que una madre, o padre, o amigo pueden tener», expresó Cintia, con los botines de Lucas colgados al cuello.
El inicio del juicio oral al que serán sometidos los 14 efectivos de la Policía de la Ciudad que fueron acusados del crimen fue fijado el 16 de marzo de 2023 por el Tribunal Oral en lo Criminal 25.
Cómo fue el asesinato de Lucas
La mañana del 17 de noviembre del 2021, Lucas González y tres amigos salieron de entrenar en el club de fútbol Barracas Central y se subieron al Volkswagen Suran de uno de sus padres para volver a Florencio Varela, donde vivían.
Se detuvieron en un kiosco y cuando volvieron a arrancar, un Nissan Tiida comenzó a perseguirlos. Dentro, circulaban tres policías de la Brigada 6 de la Comisaría Vecinal 4D, que realizaban tareas de campo. EL auto no tenía patente y los efectivos no portaban identificación.
De acuerdo con la investigación del caso, los policías informaron al servicio de comunicaciones policiales que perseguían un automóvil que llevaba dentro cuatro jóvenes, refirieron que “estaban armados” y los cruzaron con el Nissan Tiida para detenerlos.
Los cuatro jóvenes pensaron que se trataba de delincuentes debido a la falta de identificación tanto del auto como de los hombres que iban dentro, por lo cual intentaron escapar. Fue entonces que los efectivos dispararon contra el Volkswagen Suran y Lucas recibió dos disparos, uno de los cuales impactó en su cabeza y produjo su muerte al día siguiente en el Hospital El Cruce de Florencio Varela. y quisieron escapar, pero fue entonces cuando los efectivos policiales dispararon contra el Volkswagen Suran.
El gatillo fácil en la Ciudad de Buenos Aires.
Según el Mapa del Gatillo Fácil que figura en el Mapar de la Ciudad , elaborado mediante un entrecruzamiento de los archivos de Correpi, el CELS y ACVI, desde enero del 2017 a la fecha hubo 38 casos de gatillo fácil a manos de la Policía de la Ciudad dentro de CABA. Si se suman los fusilamientos cometidos por policías porteños en el conurbano, el número asciende a 140. Más del 60% de los casos son cometidos con el arma reglamentaria, fuera de servicio y de civil.
De acuerdo a un relevamiento del CELS, entre 2010 y 2018 hubo sólo 13 policías procesados y 5 condenados de un total de 32 causas iniciadas por gatillo fácil en la justicia porteña. Tres de los cinco fueron sobreseídos, entendido su accionar en el marco de una “legítima defensa”.